¿Este título despertó tu interés? Eso es lo que hace un buen discurso de apertura.
Hay muchas formas de comenzar una presentación para cualquier audiencia. Al empezar una presentación, debe recordar algunos factores clave para obtener un interés inmediato de su audiencia.
La primera es que todo los buenos discurso deben estructurarse de alguna manera.
- Apertura
- Cuerpo / contenido
- Cierre
La apertura es clave para que el público quiera escucharte. Solo toma 15 segundos para causar una buena impresión, por lo que desea que su apertura sea interesante, memorable y establezca su credibilidad como orador. ¿Suena mucho para hacer en 15 segundos?
Engancha a tu audiencia
El primer paso es captar la atención del público con un buen «gancho». Es posible que desee comenzar con los siguientes ejemplos de enlace:
- Comience con una cita interesante que se relacione con su tema
- Storytelling o una anécdota divertida.
- Use una estadística o gráfico sorprendente que capture su interés
Explica por qué este tema es algo importante para tu audiencia
Una vez que pueda despertar su interés, puede indicar claramente su tema. Desea revelar el propósito de su discurso usando un lenguaje directo y simple.
No asuma que solo porque comenzó con una cita o una anécdota divertida, la audiencia comprenderá completamente y hará la conexión a sus necesidades. Hágales saber lo que hay para ellos. Siempre asuma que su audiencia puede necesitar estar convencida de la importancia de que van a aprender de su discurso.
¿Quién eres tú?
También es importante que una vez que se explique el tema y se revele su importancia, también describa quién es usted y su experiencia en el tema. Tendrá que convencer a la audiencia de que es una fuente creíble para compartir su sabiduría.
Pronóstico
Como todos los discursos no son textos escritos en los que el público puede revisar la página de índice o los títulos de cada tema, debe intentar pronosticar dando un resumen de los temas que abordará en su presentación para que el público pueda crear una lista mental y un orden de seguir.
Tenga en cuenta que su apertura no debe ser más del 10-15% de su presentación total. Intente incluir todo lo descrito de la manera más concisa posible. Al incluir estos aspectos en su introducción, no solo causará una muy buena primera impresión, sino que convencerá a su audiencia de que lo que está a punto de hablar es algo a lo que deben prestar atención.